lunes, 28 de diciembre de 2020

28 DE DICIEMBRE, Y EL CHINCHORRO DEL SERANTES

 

28 DE DICIEMBRE, Y EL CHINCHORRO DEL SERANTES

El resultado de unas recientes investigaciones del vecino de Santurtzi y miembro de Aranzadi, Inocencio Beitia Garay, han sacado a la luz una información que bien pudiera resolver uno de los grandes enigmas de la historia bíblica.

Consultando legajos en el museo carlista de Estella-Lizarra, Inocencio ha descubierto entre ellos, un borrador del militar e historiador de la segunda guerra Carlista, Francisco Piérola Fernández, en las que se recoge en una de sus partes “ que en la zona de las Encartaciones, en el paraje conocido como “Noé del Serantes” queda a disposición del jefe de los carlistas del Distrito, Cástor de Andechaga y Toral, una nao, para que en caso de ser atacado y obstruidas todas las vías  de huida  a través del monte, pudiera ladera abajo alcanzar la mar”…



Inocencio, conocedor como el que más del Pico Serantes, no paró hasta descubrir cuál paraje podría ser el mencionado, y su sorpresa fue mayúscula cuando descubrió un chinchorro a escasos metros del refugio actual y de las ruinas de un antiguo fuerte. Varios referentes se pueden encontrar en el libro” Enkarterriko ontzi mundua” de Goio Bañales.

Ya se tenía conocimiento de que el fuerte mencionado ocupaba el espacio de una antigua ermita, rodeada esta de ricos viñedos de chacolí, y que, en su interior, un exvoto en forma de barco ocupaba un lugar preferente. El mismo exvoto que en su día fue trasladado a la ermita de Mamariga. Todo esto pudiera dar sentido a que esta ermita u otro anterior centro pagano pudiera haber estado dedicada a Noé, y que su culto pudiera haber sido llevado a Portugalete, donde su icono se venera de tiempos antiquísimos en su Puerto Viejo.



La situación actual es que Inocencio lo ha puesto en conocimiento de las autoridades municipales, y estas están conformes en dotar de un suntuoso presupuesto para continuar las investigaciones arqueológicas oportunas que lleven o no a desmentir que una de las embarcaciones auxiliares del arca de Noe pudiera haber alcanzado en su día la costa cántabra. 

No sería extraño que mientras en Portugalete con la celebración de su 700 aniversario como Villa, pudieran descubrir las catacumbas del señor de Salazar, este hecho coincidiera con un descubrimiento en Santurtzi de mayor trascendencia y antigüedad.

Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales

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