EDUARDO
ESTANCONA MENDAZONA
Edu, se acerca el 4 de octubre y
con este serán 67 las ocasiones que estás a punto de alcanzarme. Espero que
esto se repita muchos más febreros y octubres puesto que aún quedan por recontarnos
inagotables batallitas de antes, aderezadas con las de nuestros nietos de ahora.
Edu, quien nos iba a decir que en
el Abacholo que nos unió y nos vio nacer, estábamos predestinados a saber que
también nos unían lazos familiares. Tardamos en conocer que nuestros antepasados,
tú tatarabuela Hermenegilda Gregoria Gutiérrez Arana y mi bisabuelo Camilo
Antonio Gutiérrez Arana, eran hermanos y vecinos de Mamariga, y mira por donde
los dos pertenecemos a la saga de los “Gutiérrez de Montellano” que un lejano
1780 fundaron casa y raíz en Santurtzi. Después el destino hizo que
nuestras familias coincidieran en el barrio, tu ama por un lado y mi
aita por el otro, cada cual viviendo en aquellas antiguas calles que tenían por nombre" Travesía de Abachalo" .
Edu, la vida nos ha llevado a residir
en Santurtzi, al pueblo de nuestros antepasados, tú a Peñota, yo a Kabiezes, a
vivir en la frontera con la villa no sea que tengamos que volver deprisa y
corriendo a nuestro barrio del que somos incapaces de prescindir.
Edu, Zorionak adelantadas, porque
así sabrás que antes y después vigilo tu cumpleaños, y que, aunque
sé que no hace falta decírtelo, llegado el día ahí estaré para recordártelo.
Por cierto, y con respecto a las salchichas, pasan los años, y siguen siendo un
bocado celestial.
Edu, llegado el 4 de octubre, que
pases un gran día. Besarkada bero bat.
Aurelio Gutiérrez Martín de
Vidales
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