sábado, 3 de agosto de 2024

 

LA BATERÍA DE CAMPO GRANDE



La Batería de Campo Grande (el Campo de Bilbao o el fuerte de Santa Bárbara) antiguo fortín, que hoy en día estaría en terrenos de Santurtzi, junto a la escuela de música, terrenos que hasta el año 1866 administraba la villa de Portugalete bajo mandato de la Diputación vizcaína, solo nos queda un vetusto cañón que fue traído de las antiguas instalaciones de AHV, y un emplazamiento que simula una batería de cañones.

De las historias de los antiguos fortines vizcaínos, y en lo que respecta al de Campo Grande, que mejor que reproducir parte del artículo de Alfredo Moraza Barea, publicado en la revista Itsas Memoria, (MORAZA BAREA, Alfredo: “Claves para una radiografía de la defensa del Señorío de Bizkaia en Época Moderna: el sistema de baterías, fuertes y fortines costeros”, Itsas Memoria. Revista de Estudios Marítimos del País Vasco, 6, Untzi Museoa-Museo Naval, Donostia-San Sebastián, 2009, pp. 133-162.)

4.16. Portugalete: “En concreto, en la zona de Peñota, frente al polideportivo y a la altura del N.º 23 de la calle Cristóbal Murrieta donde actualmente se levanta un chalet que conserva el nombre primitivo de la zona, y cuyos cimientos se fundamentan sobre una gran plataforma de sillería de forma pentagonal que recuerda la planta que originalmente dispuso el recinto. Su construcción tendrá lugar en torno a 1639, en un “paraje muy preheminente y de donde a poco riesgo se puede hacer gran daño al enemigo “.

Con el tiempo, esta batería se fue convirtiendo en la principal posición defensiva de la población, en detrimento de otras como El Solar. La Guerra de la Independencia supondrá su práctica total destrucción (“están enteramente derrotados e inutilizados desde la entrada de los ingleses “), y tras años de abandono será nuevamente restaurada en 1827- 1828 adoptando una nueva planta tal y como aparece reflejada en un sencillo plano dibujado a principios de la Primera Guerra Carlista. Esta nueva batería presentaba una superficie mayor que la de su antecedente (26 m. de ancho por 47 de largo), con una planta pentagonal y un total de 5 troneras para cañones y una pequeña tejavana en el punto más protegido de la misma.



El estado de esta Batería Real en el año 1684 se conoce por el reconocimiento que el capitán Juan de Taborga y Sarabia efectúa en las baterías que la villa de Bilbao había construido en la entrada de la barra y puerto de la villa de Portugalete, y del informe de lo que se necesita para fortificaciones, artillería y demás pertrechos de guerra. AHFB, Bilbao Antigua, 0037/002/001.

“En la batería que está entre Portugalete y Santurce pegado a su camino Real, conviene por ser un paraje preminente y de donde a poco riesgo se puede hacer gran daño al enemigo, se haga en la frente que mira a Santurce una muralla de cal y canto que en distancia de 60 pies de largo tomándola de junto al lado del camino tenga 3 pies de ancho cuyo cimiento se alzara a 12 pies de profundo en peña viva. Y del suelo para arriba se ha de levantar en 8 pies de alto y detrás de ella un parapeto de tierra de 6 pies de ancho y 8 de alto en la cual a distancia se ha de abrir un atronera y siguiendo esta muralla se ha de proseguir con otra de 64 pies de largo que hace cara a la Barra y ha de tener 6 pies de ancho cuyo cimiento en peña viva.

Se hallará también a los dichos 12 pies de profundo y desde el suelo para arriba se ha de levantar otra muralla en 8 pies de alto y en el se han de abrir 4 troneras y desde la punta de esta muralla hasta un viñedo hacia Portugalete  que hace frente a la canal donde hay una grieta se ha de levantar otra muralla cuyo cimiento se hallará a 20 pies de profundo, y ha de tener 5 pies de ancho y 8 de alto desde el suelo y detrás de ella un parapeto de 6 pies de ancho y 8 de alto en la cual se deberá abrir un atronera y desde el remate de ella hasta el camino y pegado a un vallado de dicho viñedo, se ha de levantar también un parapeto de 2 pies y medio de ancho en distancia de 120 pies de largo la cual ha de tener 6 pies de alto.


Adviertese también que las tres murallas de 60 y 64 pies que miran a Santurce y a la Barra y la que mira al canal donde está la grieta que tiene 40 pies de largo, se han de llevar detrás del parapeto su banqueta de 3 pies de ancho y medio de alto como también el suelo en 30 pies de dicho parapeto para atrás. Se deberá enlosar y el resto de dicha Batería Real de empedrado, dando pendiente a las aguas para que no queden recogidas, y todo se deberá allanar sacando la tierra que en partes sobra y dejándola donde hace falta.

La entrada de dicha Batería Real junto al camino se debe también cerrar de pared de cal y canto y que tenga 4 pies y medio de ancho y 6 de alto, y en medio de ella se ha de abrir una puerta muy capaz que tenga buena cerradura para que al menos cuando fuere necesario de que halla gente esté cerrada, así para la guardia y custodia de la artillería y demás pertrechos se han de poner en ella como para que no entre el ganado, dicha pared de entrada tiene 80 pies de largo.

Dentro de la Batería real y pegado a la pared de su entrada y la de junto al vallado que ha de ser de 8 pies de alto, conviene se haga una tejavana que su delantera tenga 6 puertas, la cual ha de tener 50 pies de largo y 18 de ancho y 8 de alto, así para que se guarde la artillería de la inclemencia del tiempo como para que en las ocasiones que se ofreciese la gente se resguarden en ella. Se ha de formar una chimenea muy pequeña para que se haga fuego para encender mecha.



Hallándose en la Batería Real 4 piezas de a 15 de balas todas iguales que necesitan de limpieza y sus cureñas mucho reparo y por estar dicha Batería Real en paraje como se ha referido conviene en él dos culebrinas de alcance de 14 de bala cada una, que tengan  gran longitud con sus cureñas nuevas y los demás pertrechos que les corresponden a dichas cuatro picas y dos culebrinas según sus calibres son los siguientes: 700 balas, 50 palanquetas, 40 angelotes, 40 balas de cadena, 6 zoquetes con sus lanadas, 6 cucharas, 6 sacatrapos y 12 botafuegos con la pólvora y la cuerda necesaria, y menos esta, lo demás pertrechos pueden guardarse dentro de dicha tejavana para que estén más prontas, haciendo al efecto un cajón fuerte.”

Con el tiempo, esta batería se fue convirtiendo en la principal posición defensiva de la población, en detrimento de otras como la del Solar. La Guerra de la Independencia supondrá su práctica total destrucción (“están enteramente derrotados e inutilizados desde la entrada de los ingleses “), y tras años de abandono será nuevamente restaurada en los años 1827- 1828 adoptando una nueva planta tal y como aparece reflejada en un sencillo plano dibujado a principios de la Primera Guerra Carlista. Esta nueva batería presentaba una superficie mayor que la de su antecedente (26 m. de ancho por 47 de largo), con una planta pentagonal y un total de 5 troneras para cañones y una pequeña tejavana en el punto más protegido de la misma73.

A pesar de esas reformas la batería será completamente abandonada una vez finalizado ese conflicto, para finalmente en 1861 ponerse en venta en pública el “terreno y escombros de la casa o fuerte derruido denominado el Campo Grande “.

Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales

 

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario