REFORMAS EN LA TORRE
DE LA IGLESIA SAN JORGE 1897
Oficios remitidos al Ayuntamiento
de Santurce por el cura Marcos Aspizua solicitando que se realicen obras de
reforma en la parroquia de San Jorge, año 1897. AHFB, SANTURTZI 0046/013
Aunque a finales del año 1895 existieron propuestas para realizar diversas reformas en la iglesia de San Jorge de Santurtzi, entre ellas las de la torre, el 27 de marzo de 1897, el cura párroco Marcos de Aspizua y los Vocales de la Junta de Fábrica de la iglesia de San Jorge (D. Gustavo de Cobreros, D. Guillermo de la Quintana, D. José Manuel Oraá y D. Pedro de Escauriza) remiten la siguiente carta ayuntamiento de Santurce con la petición de reformar la torre de la parroquia.
Los que suscriben cura párroco y
vocales de la Junta de fábrica de la Iglesia de San Jorge de este pueblo
debidamente autorizados a Usted y con el respeto debido exponen:
Que tratando de construir la
nueva planta en la torre de la expresada Iglesia hermoseando con dicha obra el
pueblo y mejorando en lo relativo al reloj y servicio religioso. Esperan que
después de examinados los planos que se acompañan les autorice la construcción
de los mismos, así como les conceda los pequeños salientes que se ocuparán de
la vía pública, y se les señale el espacio que deberán cerrar para los trabajos
y seguridad pública.
A continuación, aprovecho la ocasión para
agradecer al sacerdote Luis Emiliano Pinedo Murga por sus aportaciones a la
historia local. Sus “apuntes” han sido y son fuente de consulta de todos
aquellos que en algún momento nos hemos dedicado a investigar la Historia de
Santurtzi.
De la obra de Luis E. Pinedo, (Santurce,
-Apuntes- Aspecto religioso, Parte 1), recojo los siguientes apuntes relativos
a la torre de la iglesia de San Jorge.
LA TORRE ACTUAL
Durante dos siglos la añorada
torre, conseguida por fin a mediados del siglo XIX, tuvo una efímera existencia
de solos cincuenta y tres años. Al agonizar ese mismo siglo XIX fue
estudiadamente derribada para ceder su puesto a otra que se irguió y sigue
irguiéndose orgullosa dando tono señorial al pueblo; si bien ya hoy como
vetusta zagala va quedando “tapada y desconocida” por la abundante y
gigantesca edificación de su derredor. Pero siempre veneranda y “empatinada”.
Respecto de su construcción
tenemos la documentación completa, gracias a Dios.
El año de
1896
El día 31 de marzo, a los ocho
meses de haberse encargado de la parroquia, el párroco D. Marcos de Aspizua y
los Vocales de la Junta de Fabrica de San Jorge (D. Gustavo de Cobreros, D.
Guillermo de la Quintana, D. J-Manuel Oraá y D. P. de Escauriza) firmaban
una solicitud al obispo (como secretario firmaba el Escauriza). En ella
EXPONEN:
a) Que
hallándose en estado ruinoso el techado de la sacristía han procedido a la formación
del plano y presupuesto de la obra de restauración, que asciende a tres mil
veintiuna pesetas (incluido el importe de una nueva puerta que una el
presbiterio con la sacristía).
b) Que, así
bien, interesa la ampliación de dos alas al coro actual… cuyo …….. y
presupuesto van unidos, ascendiendo su total importe a dos mil ciento noventa y
ocho pesetas.
c) Que la
Parroquia cuenta con fondos de seis mil ochocientas ochenta y cuatro con
dieciocho céntimos sin contar con las limosnas que hubieren de aportar los
fieles y especialmente el Muy J. Ayuntamiento de este Concejo.
Acompañan sendas “Memoria y
Condiciones” y plano debidamente hecho, referentes a cada una de las obras
solicitadas. La firma en Portugalete a 16 de noviembre de 1895, FRANCISCO
BERRIOZABAL, con el Vº Bº del arquitecto EMILIANO PAGAZAURTUNDUA.
El obispo lo pasa todo al
arcipreste de Portugalete, para que informe y el arcipreste DON DOMINGO
ECHEVARRIA GARAY, informa favorablemente el 23 de abril (1896)
festividad de San Jorge.
Año de
1897
De nuevo un año después, el 18 de
marzo de 1897 el párroco y los Vocales de la Junta de Fábrica (que siguen
siendo los mismos) se dirigen al obispo con una solicitud referente a la
Torre, en la cual EXPONEN:
a) Que
tienen en cuenta la deficiencia de la torre de la iglesia;
b) Que
desean satisfacer las necesidades de la piedad de los fieles, así como también
la de los forasteros que, con extrañeza ven el mal estado de la actual.
c) Que,
entre ellos, merecen especial mención los hijos del Finado Excmo. Señor D.
CRISTÓBAL DE MURRIETA quienes han facilitado la cantidad de Treinta mil pesetas
a esta Fabrica con el exclusivo objetivo de que se inviertan en la reposición
de la Torre actual o en la construcción de una nueva si necesario fuere… Esas
30.000 pts. estaban en poder de la Diputación. A ella se las había prestado D. Cristóbal
para construir carretera Portugalete-Santurce. La Escritura y condiciones del
préstamo eran del 25-IX-1861.
d) Que, como
quiera que la Junta tiene en su poder la referida cantidad ha comisionado al
inteligente señor DON FRANCISCO BERRIOZABAL que merece la confianza de la
Junta, para que, examinando detenidamente la iglesia y su torre, forme el Plano
que procede;
e) Que,
efectivamente, ha formado el Plano de una nueva torre conforme a la
arquitectura de la iglesia, por no considerar suficiente la solidez de la
actual…;
f) …. Y ha
formulado el pliego de Condiciones.
Seguidamente SUPLICAN “la
gracia de poder construir una nueva Torre que perpetúe la memoria del “Excmo.
Sr. D. Cristóbal de Murrieta (q. e. p. d.) y de sus dignos hijos que tan
piadosamente han correspondido al objeto deseado en el que esta Junta tiene
fijas sus miradas ha ya mucho tiempo…”
(Leyendo el final de esta
solicitud, no nos satisface que se diese a la construcción de una nueva torre
la finalidad de “perpetuar la memoria de”; aunque comprendemos que es
una pura fórmula al uso de aquel tiempo. De todos modos, ahí está el grandioso
y primer monumento santurzano erigido a D. Cristóbal, bien pocos serán, hoy ni
nunca, quienes lo reconozcan tal).
Sigue, con fecha del 14 de marzo
de 1897 y firma de D. Francisco de Berriozábal una MEMORIA en la que éste
razona por qué se desecha la torre existente y cómo concibe la que habría de
hacerse nueva.
En cuanto a los motivos para
rechazar la torre que ya hay, recogemos de la citada Memoria los siguientes:
1. Las
Torres son, de por sí, algo ornamental y que señala los puntos principales de
las poblaciones.
2. De hecho,
la iglesia de San Jorge está y señala el punto principal de Santurce.
3. Pero la
torre que ahora hay, por su estado y conjunto, contribuye a empequeñecer la
iglesia contigua; desdice del sitio que ocupa y del fin a que está destinada.
4. La
impropia terminación (remate) de la misma, el corto radio sonoro que
abarca el sonido de sus campanas (por su pequeña elevación y colocación)
y la poca utilidad que reporta la esfera de su reloj.
Sobre cómo concibe la proyectada
nueva torre, dice:
1. Utilizando
los cimientos de la actual… y con seis contrafuertes, se eleva elegante el
primer cuerpo o cubo, en cuya parte superior se colocarán las campanas.
2. Sobre
este cuerpo se eleva otro poligonal, decorado con pilastras y cornisas.
3. Sobre
este segundo se elevará el pequeño ciborio que, haciendo veces de ático,
contendrá los cuatro horarios para la colocación de las cuatro esferas del
reloj.
4. Sobre
expresado ático empieza la cúpula peraltada que terminará en un anillo…
5. … sobre
el que se construirá la linterna, dentro de la cual queda espacio para la
campana del reloj…
6. … y la
expresada linterna terminará con una pequeña cúpula…
7. … de la
que arrancarán la cruz y los pararrayos.
después vienen las Condiciones
que deberán cumplirse en la construcción de la torre nueva. Son 14 artículos y
uno más que aclara el 13º. En ellos se explica todo lo referente a materiales
que se han de emplear, su calidad, las masas, las medidas, etc. (El lector
curioso lo tiene por menudo en el archivo parroquial, en el diocesano de Derio).
Y pone por último el PRESUPUESTO
pormenorizado cuyo total es de treinta y una mil, ochocientas sesenta y cinco
pesetas con cincuenta y dos céntimos.
De este Presupuesto recogemos tan
solo lo de que se requerían 248,89 ms 3 de piedra arenisca de ARRIGUNAGA, cuyo
valor se calculaba a 110 pts. el metro cúbico. (o sea: 26.717,90 pts.)
Pasando a revisar el Libro de
Cuentas, encontramos:
“Recibido del Ayuntamiento, por orden de
los hijos del finado D. Cristóbal de Murrieta, para la construcción de una
nueva torre para la parroquia: 30.000 pts.”
“Al “Noticiero Bilbaíno” por anuncios
de la torre; 8,25 pts.
Se conserva un ejemplar de aquel
periódico diario en que aparece el anuncio.
Conservamos también fotografía
tomada durante la construcción; en ella aparece D. Juan-José Urrutia.
A JUAN-JOSE URRUTIA, constructor
de la torre, según recibos adjuntos: 12.800 pts.
Firman: F. de Escauriza, Marcos
de Aspizua, Tomas Oraá, G. de la Quintana, y Gustavo Cobreros.
El 9 de noviembre constan pagadas
36 pesetas a FRANCISCO RIVERO “por dieciocho noches que estuvo de guarda de
la Iglesia para el cuidado de la misma”.
El recibo del “Noticiero Bilbaíno”
es del 28 de septiembre, “por anuncio de once líneas, publicado tres veces
en tercera línea”.
Del 26 de junio hay un recibo
firmado por Juan-José Urrutia: “recibido de D. Guillermo de la Quintana, 800
pesetas a cuenta de trabajos que estoy realizando en la torre de Santurce”.
El 7 de agosto: “recibidas por
D. Juan-José Urrutia, de D. Guillermo depositario de los fondos, 2000 pesetas
para su cuenta de las obras de la nueva torre, que, adosada a la iglesia, estoy
construyendo”. “Aspecto religioso I”
De los días 3 y 30 de octubre,
del 27 de noviembre y del 22 de diciembre hay sendos recibos del mismo Urrutia
de 1500, 2500, 2000 y 2000 pts. respectivamente “por las obras de la nueva
torre que estoy construyendo”.
En el año
de 1898
El 4 de septiembre, los ya
conocidos párroco y Vocales de la Junta de Fabrica dirigen otra solicitud al
prelado diocesano. En ella dicen:
a) Que se ha
terminado felizmente la construcción de la torre presupuestada en 31.865,52
pesetas;
b) Que fue
adjudicada a D. Juan-José Urrutia, vecino de Santurce en la cantidad de 31.970
pesetas;
c) Pero que,
por mejoras y gastos imprevistos, la cuenta ha subido a treinta y tres mil,
trescientas veintiséis pesetas con sesenta y ocho céntimos; (33.326,68 pts.).
d) Que hubo
que consolidar la puerta de la iglesia por el arco de la torre; y hubo que
consolidar y afianzar la pared de la iglesia que sirve de apoyo a la torre…
e) …. Y que
la nueva obra supone 926,26 pts.; Arquitecto, el Sr. Berriozábal.
Y piden poder pagar la diferencia
de los fondos parroquiales, que los hay.
El obispo accede en rescripto del
28 de septiembre de 1898.
Están las cuentas en general, y
recibos particulares.
Al constructor Urrutia se le fue
pagando entre enero y diciembre de 1898 en “plazos” de 5000… 1500… etc.
pesetas.
Del 17 de novbre. de 1898 hay
cuenta de PEDRO GOIRI, “de la escalera de las campanas”. Son 384,65 pts.
El Procurador que tramitaba las
gestiones en Vitoria fue D. Antonio-Esteban de Echevarría.
Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales
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