ORIGEN
DEL PUERTO PORTUGALETE - BILBAO
El Abra esa ensenada, con sus
arenales que se desplazaban con los
temporales hacia la desembocadura de la ría de una manera natural, no fue un
impedimento grave para la navegación, hasta que a Portugalete y a la Villa de
Bilbao se les concede la categoría de puertos comerciales a comienzos del siglo
XIV. Con esta decisión tomada por parte
de Doña María López de Haro, se inicia un mayor tránsito de navíos y con ello un mayor rigor comercial, lo que obligó a una
continua búsqueda de soluciones para facilitar la entrada de dichos navíos en
el puerto de Portugalete.
Sin embargo, no sería hasta el tercer tercio
del siglo XIX, cuando Evaristo Churruca, proyecta y dirige las obras de
ingeniería que eliminan los obstáculos que fueron causa de
tantos naufragios y sus graves consecuencias en el comercio marítimo y
en las personas. Mi bisabuelo Camilo Antonio Gutiérrez Arana, natural de
Santurtzi, sería uno de tantos que fallecería en el Cantábrico, en su caso
realizando sus labores de piloto leman.
Mientras tanto, hasta la
culminación del proyecto de Churruca, y recogiendo parte de la obra de César de Saavedra” Origen, Vida y Costumbres
de la Villa de Portugalete”
podemos
resaltar las diferentes alternativas que se proyectaron para hacer más
navegable la Ría y la eliminación de la barra, a lo largo de cerca de 350 años.
En el año 1502,
ante la actividad marítima comercial entre Bilbao y Burgos, se pensó realizar unas obras en la ensenada de Portugalete con la intención de que
cumpliera las funciones de puerto exterior. Por ello se nombraron a los
técnicos Juan de Garita, Guiot de Beaugrant y Pedro de Castillo para que
hiciesen un informe sobre el estado de la barra de Portugalete. Este informe fue sumamente negativo, poniendo de
manifiesto que si no se realizaban las obras oportunas, la ría de Bilbao corría
el riesgo de cegarse. En este informe se aconsejaba realizar unas obras para
desviar el cauce de la ría, lo que contó con la oposición de Guecho.
En el año 1515, se encargaron a Flandes unas grandes boyas para que una vez colocadas en la barra y sujetas con cadenas, se pudiera encauzar el canal. Esta obra tuvo un coste de 300.000 maravedíes.
En el 1538 el Consulado de Bilbao y su Universidad de
Mercaderes, junto al Prior y Cónsules de la Casa de Contratación de Burgos se
comprometieron por una escritura del 6 de julio, a la continuación de las sobras anteriores. En el año 1540, el
muelle de Portugalete tenía 400 brazas, y en 1558, el maestro cantero Erauso
continuó estos trabajos.
El 22 de agosto de 1568 Portugalete y Bilbao firmaron
otra escritura sobre el arreglo de muelles, estableciendo que los muelles antiguos
que estaban en la parte de Portugalete continuaran hacia Sestao. Hacia finales
de siglo se continuaron las obras hacia Santurce.
En el
año 1673, se puso fin a las obras del nuevo muelle hacia la barra.
En el
año 1712, como hubiera necesidad de hacer que la barra no fuera invadida por la
corriente de arenas movedizas, el Consulado de Bilbao, mandó colocar una
barrera de navíos viejos y barcos cargados de piedras hacia la parte de
Santurce para canalizar el río.
Hacia el año 1754 por parte del Consulado se elabora el siguiente Plan para controlar la barra:
De la
desembocadura de la ría de Bilbao por la parte del mar que sirve para indicar
la prolongación del muelle sur, con el fin de profundizar la barra.
A- Montecillos
de arena móviles en que interesaría la
plantación de pinos para fijar la
arena que los vientos arrastran sobre la ría, cuya causa aumenta la altura
de la barra.
B- Nueva
dirección propuesta para el muelle Sur, con el fin de rechazar las arenas que
forman la barra.
C- Extremo
actual del muelle sur.
D- Extremo
actual del muelle Norte en que no se propone la prolongación por juzgarla
inútil.
E- Por
menores sobre otra mayor escala de una parte de fundiciones del muelle Sur.
F- Perfil
del mismo muelle que se propone actualmente ejecutar con madera a una altura de
5 pies solamente más arriba de la bajamar en aguas vivas.
G- Perfil en
que está marcada la elevación en piedra que podrá ejecutarse en otro tiempo si
el muelle de madera no llevase plenamente el objeto deseado.
Manifiesto relativo a la embocadura de los
muelles.
A- Parte
destruida que se ve restablecer inmediatamente al mismo tiempo que se reparan
los otros puntos que este muelle interesante que importa no abandonar.
B- Dirección
de la prolongación que se propone ejecutar sobre una curva poco cóncava
interiormente con el objeto de profundizar la altura de la barra.
C- Prolongación
esencial para la defensa de la Ría derecha dirigida hacía Portugalete para
sostener la corriente que pierde su fuerza en el punto. Es igualmente esencial
reparar las roturas y establecer el dique que es de grande utilidad.
En
el año 1824 se levantó la torre de señales, pero en esa fecha aún no habían encontrado la
fórmula definitiva para impedir que se pudiera cegar la barra, y con ello secarse el río.
Por fin, en el año 1872 se constituye la Junta de Obras del Puerto, y desde ese
momento las cosas cambian para bien. Se proyectó la prolongación del muelle de
Portugalete hasta las rompientes, y poder así mejorar la embocadura de la ría.
En el año 1881 comenzaron las obras del Muelle de Hierro y con ello alargar la escollera hasta la barra. Posteriormente se construiría el rompeolas, y con
estas obras, Portugalete, por fin después de tantos años tendría un puerto
gracias a Evaristo Churruca.
Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales
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