EL COCO DE LA RIGADA

Mi amigo Carmelo, baserritarra de la Rigada me ha regalado este coco acompañando la pregunta de que veo yo en él.

Me explica que, hace tres años, en una anterior lucha por los derechos de los agricultores y ganaderos, un grupo vasco de este sector, invitados por la APAA, Asociación de Pequeños Agricultores Andaluces, se desplazaron con sus tractores a Andalucía y allí todos juntos pudieron revindicar  sus derechos.

Igual o parecido de lo que van a hacer cientos de vascos en su pronto desplazamiento a Sevilla, con la diferencia que estos regarán con su dinero la economía de la capital andaluza.

Me comenta Carmelo, que un agricultor lugareño de Bélmez-Jaén, regaló a cada uno de los vascos un esqueje de coco picua, que según él tenía la particularidad de aguantar todo tipo de climatología.

Plantado el esqueje, dos años después el fruto del cocotero de la Rigada, son unos frutos singulares, en nada parecido a la de otros cocoteros vizcaínos.

Y así, le contesté; yo veo un coco con un rostro que me recuerda a un primate asustado. Quizás la tierra de Somorrostro, sus cuevas, fueron pobladas por los primeros o segundos neandertales, que su espíritu yazca en su suelo y ello se vea reflejado en un coco de Bélmez y por  tanto que los misterios continúen.

Y si fuese así, mi consejo es que vaya preparando la entrada al terreno  para que el gentío acuda a ver tal acontecimiento cocotero, con el adelanto de dos euros la entrada, que ingenuos hay para regalar.

Por cierto, si eres uno de los aficionados que tienes intención de ir a Sevilla a ver la final, que no te engañen como a Carmelo, porque todo en la vida es fruto de la Naturaleza.

Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales