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domingo, 14 de septiembre de 2025


VICENTA MARTÍN DE VIDALES MILLAS, MI AMA


Ama, como no tengo momentos para olvidarte, te recuerdo el tiempo de todos los días, y los 14 de setiembre más.

Mi Ama, Vicenta Martín de Vidales Millas, nace el 14 de setiembre de 1914 en Mora (Toledo) y fallece en el hospital de Santa Marina de Bilbao el 12 de octubre de 1995. Sus padres fueron Vicente Martín de Vidales García Carretero, nacido en Mora en el año 1886, y que falleció en Toledo, el 21 de enero de 1927, y Juana Millas García, nacida en Mora en el año 1882 y que falleció en el mismo pueblo toledano el 22 de enero de 1971. 
 

Como buena moracha que fue, en los cincuenta años que vivió en Portugalete jamás olvidó a su pueblo, y a sus hijos todos los días nos regalaba un dicho o un recuerdo de Mora.

Sus abuelos por parte paterna fueron: Juan y Manuela y por parte materna: José y Juana. Todos ellos nacidos en Mora, y de profesión labradores. Esta saga familiar era conocida en el pueblo de Mora como “los Calaveras”. Así que sus hijos bien podemos presumir de ser "Navarrillos" por parte paterna y "Calaveras" por la materna



Sus hermanos fueron: Francisco Martín de Vidales Millas, (Mora 1910), Natividad, (Mora 1912) y Sagrario, (Mora, 1917).  

Mi ama Vicenta estuvo casada en primeras nupcias con, Amalio Rodríguez Jiménez, de profesión labrador, nacido en Mora el 11 de junio de 1911, y que falleció fusilado en la cárcel de Ocaña, por mandato de Franco el 31 de enero de 1941. La boda se celebró 10 de setiembre de 1935.


Amalio era hijo de Ascensión Rodríguez Jiménez y de Baldomera Jiménez Salamanca. Todos nacidos en Mora, y de profesión, labradores. Amalio solo tuvo una hermana de nombre Ascensión nacida en Mora en el año 1913.



En el año 1945 llega a Portugalete mi Ama Vicenta Martín de Vidales Millas, anteriormente, su marido, Amalio Rodríguez Jiménez, condenado por un tribunal militar franquista había sido fusilado en la cárcel de Ocaña, y ella a su vez expulsada del pueblo durante un periodo mínimo de diez años.  Su vida era insostenible en el pueblo que la vio nacer.

Viuda y con tres niñas pequeñas, aconsejada por familiares que realizaron los trámites oportunos, se desplaza a Portugalete, puesto que sus tres hijas nacidas en Mora: Ascensión, Vicenta y Carmen, eran ingresadas en la Congregación de las Esclavas del Amor Misericordioso de Sestao.

La Congregación de las Esclavas del Amor Misericordioso, había sido fundada en Madrid por La Madre Esperanza en la Nochebuena del año 1930, y en 1933 ya había una congregación en Santurce y en el año 1935 otras en Sestao y Bilbao. Esta fundación se distinguirá por su sensibilidad social. La Madre Esperanza ve con claridad la guerra que se avecina. Víctimas particulares e inocentes serán los niños que en gran número se verán huérfanos y abandonados, disponiendo las monjas el papel de madres. Disponían sus estatutos expresamente que las hermanas comieran lo mismo que los niños, y solo después que estos hubieran acabado, y que por lo menos un 25 por ciento de los internos tuvieran estancia absolutamente gratuita.

Estas serían las buenas voluntades de todas las congregaciones religiosas que acogieron a los niños en la posguerra, pero la realidad total fue bien distinta, tal y como lo relata Almudena Grandes en su libro “Las tres bodas de doña Manolita”

Vicenta, como muchos de los emigrantes que con escasos recursos llegaron a Portugalete a partir de la terminación de la guerra, compartió con ellos la práctica habitual de buscar alojamiento en una casa particular que les alojara como pupilos con derecho a cocina. En el caso de mi ama, su destino la llevó a la calle del Medio, en la casa de Florencio “Negus” e Isabel.

Su vida con la familia del “Negus” transcurre hasta 1948, año en el cual se casa con mi aita Patricio, pasando desde entonces a vivir a la casa de Abatxolo, donde nacimos los cinco pequeños. Durante este tiempo su medio de vida y sus ingresos económicas provenían de trabajos del hogar en casas. Con dichos ingresos pagaba el alquiler y lo que le llegaba para ayudar a sus hijas.




El cómo pudo llegar a conocerse Vicenta y Patricio, pudiera ser de la siguiente manera: las hijas de Vicenta estaban internadas en Sestao en el Amor Misericordioso, Araceli que hasta los 11 años había vivido en Ortuella y que estaba ingresada en el preventorio José Antonio de la sección femenina de Gallarta, es llevada en enero de 1947 al mismo centro sestaotarra, al igual que Purificación la hija de Florencio e Isabel.

Mis hermanas Carmen y Araceli estarían en Sestao hasta cerca del año 1951, sin embargo, mis hermanas Ascensión y Vicenta, antes de ir a vivir a la casa de Abatxolo, estuvieron unos años en la Congregación que las Esclavas del Amor Misericordioso tenía en Bilbao.

Esto posibilitó con toda seguridad que las tres familias se conocieran entre sí en las visitas a sus respectivas hijas a Sestao, y que la consecuencia final fuera el matrimonio de Vicenta y Patricio. Con esta unión, Vicenta recogió entonces el apodo de su suegra María Soledad “La Navarrilla”, y desde entonces fue conocida en Portugalete como Vicenta “La Navarrilla”, apodo que a su vez trasmitió a sus hijas e hijos.



Mi ama con tres hijas, mi aita con tres hijos, y los cinco restantes que tuvieron entre ellos, y que llegamos a este mundo de una manera escalonada, Nieves en 1949, Blanqui en 1951, Javier en 1953, Aurelio en 1955 y Arantza en 1957, formamos una familia en total 11 hermanos. En aquella casa que como me contó mi hermana Carmen, cuando no había agua potable, cosa corriente, había que bajar hasta la fuente de la Canilla, y subir los baldes a casa tapados con hojas de higuera para que no se desparramara el agua. Un millón de anécdotas nos trae esta casa a sus antiguos moradores……

A partir de entonces, la vida laboral de Patricio es como marinero en el Sporting y en AHV. La pesca, es un recurso para ayudar la economía familiar de tanta prole.

Vicenta que con 12 años servía en una casa en Madrid, y que se doctoró bien pronto arenando escaleras, fue una  incansable trabajadora como bien lo atestiguan sus diferentes carreras laborales, esas que no dan para poner un diploma en la pared, pero si para sobrevivir.

Mi ama Vicenta, titular indiscutible y honorífica de todos los calendarios que quieran glosar a la mujer trabajadora, desempeño infinidad de actividades laborales para sacar a sus hijos adelante. Sea lo siguiente una muestra, que no la totalidad:



En el mismo portal donde compartía vivienda con Isabel y Florencio “Negus” estaba la confitería de Barriocanal, lugar donde se dedicó a realizar tareas de limpieza bajo el auspicio de Aurora. Lo mismo que en el portal que estaba  enfrente del suyo, en la casa de Rosaura Alberdi, que yo conocí y tengo un recuerdo de ser una mujer buena y cariñosa. Más adelante trabajaría en casa de Pepita, igual de buena persona, ambas mujeres y su familia con mi ama se portaron extraordinariamente.

En el centro de la calle del Medio o Víctor Chavarri, la sastrería de Juan de la Fuente. Aquí mi madre trabajaba limpiando y con el tiempo mis hermanas Carmen y Vicenta de costureras, junto a Nieves Larrea, Lauri, Felisita, Ana Mari etc., buenas trabajadoras, y si no lo fueran, la hija de Franco, Carmen Polo, no hubiera encargado a esta sastrería hacerle un abrigo.

Cuantos retales no habrá recogido, guardados en la faldiquera Vicenta en la sastrería. Con estos después nos haría apaños en la ropa. Arte, ganas y estilo la sobraba para regalar.



Frente a la sastrería, la pastelería de Mendizábal, lugar donde trabajó junto a Araceli. Cada una en sus tareas, bien diferentes, pero oportunas para sacar la casa adelante. ¡Qué buenos estaban los manolitos de mantequilla! También trabajó en el matadero municipal limpiando vísceras, y en el Ojillo, en la carnicería de Lucita donde se ganaba el jornal picando cebolla. En ello estaba el día que muy embarazada de mi o de mi hermana Arantza se resbaló y casi nacimos en el intento.

El lavadero era otro de los lugares donde sacaba otro jornal, lavando nuestra ropa y la de aquellos que se lo solicitasen. Lavaba para la familia Ibarmia, para Ramonita, también para Felisa, una familia que vivía al comienzo de las escaleras del tren y otras que no recuerdo su nombre. Ropa blanca que en algunos casos entregaban mis hermanas los domingos por la mañana antes de ir a misa, puesto que la iglesia nos pillaba de camino. En otros casos, el día de labor que lo solicitasen.



El estraperlo y el tren de la Robla en el que viajaba, fueron medios para sacar provecho al excedente de pesca que Aita traía a casa. Ir hasta Valmaseda para traer algo al cambio y engañar a los del fielato, era un arte que manejaba con suma maestría. Sin embargo, las mejores piezas, sobre todo jibiones, eran destinadas a equilibrar la balanza del fiado de las tiendas de comestibles del barrio. Entonces, en los ultramarinos, las familias con sueldos escasos se compraban y se apuntaba la compra para liquidarla el día de paga.

Otra fuente de ingresos fueron los colchones. Si Vicenta era buena en todo lo que hacía, como colchonera no tenía precio. Las campas del lavadero y de Repélega son testigos de ello. Primavera y verano las mejores épocas para la realización de esta actividad. Era ponerte en la campa a varear, y pronto una mujer te preguntaba si se vareaba para casa o para fuera. Si la respuesta era lo segundo en seguida se llegaba al acuerdo del día y precio. Vicenta era tan honrada, que jamás por más que quisiera podría llegar a rica con este trabajo.


Cuantas vacaciones escolares a partir de cumplir los 15 años, me hacía acompañarla a varear colchones. En aquel entonces me decía: Aurelito, hoy tenemos faena, y una Fanta ese día me llevaba al gaznate. Hoy en día en mi casa siempre tengo una vara de avellano, es mi fiel compañera en mis paseos por el monte, y además me regala muy buenos recuerdos.

También estuvo hasta que alcanzó la edad de 65 años, unos quince años trabajando en el bar Paco o “Casa Vicente” de Portugalete. Ni de esta actividad, ni de las anteriores le quedó pensión alguna, unas porque ella no se dio de alta y en otras, porque no la dieron.

Vicenta hasta su fallecimiento en 1995, en los 50 años que vivió en Portugalete tuvo tiempo suficiente para dejar una huella, de la que estamos orgullosos sus descendientes. Trabajadora, cariñosa y amante de su marido Patri e hijos, nos enseñó con su ejemplo, que la Vida es más sencilla si lo que hacemos, es con Amor.

Esto, y muchas cosas más fueron posibles a causa de que el destino trajera a mi Ama a Portugalete, que viviera en casa de “Negus”, que pudiera conocer a mi Aita, y yo, que lo pueda contar, para homenajear a todos y todas, que hicieron de su vida un sacrificio por sacar a su prole adelante.

AMATXO, MAITE ZAITUGU.

Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales.


miércoles, 3 de septiembre de 2025


BUQUE SARASTONE, NIÑOS REFUGIADOS FRANCIA,
GUERRA CIVIL
 Patricio Antonio Gutiérrez Aguado

Mi hermano Antontxu nace  tal día como hoy el 3 de setiembre de 1937 en Caen (Francia) y fallece el  22 de agosto de 2016 en Gorliz. Su recuerdo me lleva a no poder imaginar cómo sería su nacimiento  en la soledad de su madre Felipa, el silencio de su hermana Araceli, y lejos del calor de la familia. 

En los días previos a ser ocupado Bilbao y los pueblos que miran a la Ría en junio de 1937, fueron cientos las personas que evacuaron a Santander por los más diversos medios.



Cuando las fuerzas sublevadas franquistas y sus aliados, entraron en Portugalete en junio de 1937, la desbandada de ciudadanos fue total, y si hasta ese momento, el buque “Habana” desde el puerto de Santurtzi, era el medio de alejar a los niños de corta edad fuera de la contienda, con la caída de la margen izquierda, los nuevos evacuados lo fueron  a primeros de julio desde el puerto de Santander y posteriormente en agosto, del puerto del “Musel” en Asturias.

Muchas de estas personas que escaparon de Portugalete y pueblos vecinos, consiguieron embarcarse en el buque inglés de nombre Sarastone, que, del puerto de Santander, el 9 de julio de 1937 con 2.500 personas a bordo, se dirige al puerto francés de St. Nazaire. Sus pasajeros a bordo, la mayor parte eran niños de edades comprendidas entre los 5 a 15 años de edad, pudiendo ir acompañados en esta ocasión por familiares.

Del puerto de St. Nazaire, fueron trasladados y repartidos por diversas regiones francesas, en concreto a la región de Calvados-Normandía-Francia, donde un Comité de bienvenida les iba repartiendo en el seno de familias adoptivas o en diferentes colonias o refugios en manos del gobierno francés, fueron destinados una centena de personas, entre ellos varios vecinos de Portugalete.

Esta estancia en tierras francesas, duró hasta comienzos de noviembre del mismo año, cuando el gobierno francés con la excusa de que en el lugar de procedencia de los refugiados no existían ya combates, y por lo tanto en ausencia de guerra y peligro, podían retornar a España. Por detrás también estaba el argumento del alto coste económico que significaba para el gobierno francés el mantenimiento de dichas colonias.

 REFUGIADOS en CALVADOS julio 1937, datos aproximados:

BALLEROY  11 PAD…… (PAD. Familia adoptiva.)
BAYEUX          1 PAD
CAGNY           1 PAD
PONT- L¨EVEQUE  4 PAD
COLOMBELLES 2 PAD
CAEN              54 REF…… (REF, Refugio, Colonia.)
MONDEVILLE    30 REF
CONDE- SUR- NOIREU  4 CAEE…Comité ayuda niños españoles.


Con los bombardeos sucedidos en la II Guerra Mundial en el verano de 1944 en la región de Normandía se perdieron las informaciones que estaban anotadas en ayuntamientos e iglesias, y ahora estas las historias personales quedan pendientes de ser recogidas en su totalidad, y el tiempo corre en contra de dichos testimonios, porque los supervivientes cada vez son menos. Aquellos niños, son los abuelos de hoy en día.

De estos testimonios, los de Tomás Izaguirre las Heras y los que corresponden a mi familia, en concreto a Felipa Aguado Bastida, aún habiendo más, son los únicos casos de personas relacionadas hoy en día con Portugalete que se embarcaron el 9 de julio en el buque Sarastone, y de los que he podido recoger alguna información.


FELIPA AGUADO BASTIDA, (Ortuella 20/08/1911, Portugalete 15/06/1944) casada con Patricio Gutierrez del Moral, natural de Portugalete, embarcó en el buque Sarastone embarazada de 7 meses en compañía de su hija Araceli Gutiérrez Aguado, nacida el 29 de mayo del año 1936, y por lo tanto con un año escaso de edad.

Mi hermano Antontxu, nace en Bénouville- Caen, en la maternidad de (Hombay 03/09/1937 – Gorliz, 22/08/2016). Mi hermana Araceli por su corta edad en el exilio, no tiene apenas recuerdos, y lo poco que sabe de aquella estancia en Francia, es lo que le fueron contando otros portugalujos de mayor edad que ella, y que tuvieron el mismo destino.



TOMAS IZAGIRRE LAS HERAS, natural de Erandio, nació el 11 de marzo del año 1927, raro era el día que no le veíamos pasear por el muelle de Portugalete, luciendo su eterna juventud.

Su aita Salustiano Izagirre, “Salus”, según me cuenta Tomás, consiguió el mismo día que era destruido el Puente Colgante embarcarle a él y a sus tres hermanas mayores que él, en una lancha con destino a Santander, y de aquí una vez que se embarcaron en el buque Sarastone dirigirse a Villequiers- Caen. Y como el resto, retornar tres meses después a Erandio, y varios años después a Portugalete, de donde no se separó desde que tenía unos trece años hasta su fallecimiento.

Su relato hace revivir como en esos días anteriores al 22 de junio, decenas de pequeñas embarcaciones, bordeando la costa para si evitar a los buques franquistas que controlaban el Abra, se dirigieron hacia Cantabria, evitando así el tortuoso camino por carretera, y los peligros que entrañaba ese itinerario. 

Como en tantos otros relatos, el recuerdo del pan blanco, en contraposición del pan negro que se encontraron a su vuelta a España, surge una vez más, así como los vivos recuerdos de su aita, patrón que fue de los remolcadores Eusko Mendi y del Altsu Mendi de la flota naviera Sota y Aznar.

Como curiosidad, señalar que el buque inglés de carga “Sarastone”, tiene un lugar de honor en la historia, y por ello sus restos están considerados como Bien Cultural por la Junta de Andalucía, al haber sido hundido en la II guerra Mundial, por un avión alemán en octubre del año 1941 en el puerto de Mazarrón, Huelva.

Aurelio Gutiérrez Martín  de Vidales






sábado, 30 de agosto de 2025

 

LORETXO ZORIONAK



Este 30 de agosto, fecha que se conmemora el día de Santa Rosa de Lima, es la fecha del nacimiento de nuestra hija Lorea "Navarrilla", cuyo nombre en parte corresponde al día en que nació hace 46 años.

La Vida Pasa, y la edad de la vida como el viento a veces lo tenemos a favor y otras veces en contra. Vivir a favor es fácil, es dejarse llevar, sobrevivir a las adversidades solo es potestad de las que sois poderosas.

Desearte que el viento de la vida te empuje a los mejores logros posibles y que la felicidad te inunde el pensamiento.

Loretxo, musu bero bat.

Ama-Aita

sábado, 16 de agosto de 2025


ROQUE ANTONIO GUTIÉRREZ DEL MORAL "NAVARRILLO"


Mi tío Antonio “Navarrillo” o conocido en el mundo del remo también como “Gallazo”, nace en Portugalete un 16 de agosto del año 1907 festividad de San Roque, patrón de la Villa, y por ello le pusieron de nombre Roque Antonio Gutiérrez del Moral.



Hijo de marinero y sardinera, era normal que su vida estuviera ligada al mar, al remo y al Muelle Viejo de Portugalete, profesiones, aficiones y lugares donde trascurrieron toda su vida. Falleció soltero en el año 1962, dejando atrás una década de actividad dedicada al remo, y siempre defendiendo los colores de la bancada portugaluja.

                  Antonio en la parte superior izquierda, Patricio último a la derecha
En el remo coincidió en diferentes ocasiones con su padre León Aureliano Gutiérrez Castillo, mi abuelo, cuando este fue patrón de la trainera Virgen de la Guía y también con su hermano Patricio, mi aita.

Dedicado a la pesca en el arte del palangre, el dique fue un buen testigo de su actividad, y la compañía de su madre María Concepción Moral Santa Cruz” Navarrilla”, su mejor aliada.



Mi tío, un hombre sencillo y humilde, que, como tantos hombres y mujeres de Portugalete, pertenecen a ese colectivo de personas anónimas que jamás tendrán un recuerdo colectivo. Por los que jamás se celebrarán grandes faustos en sus memorias, a ellos les dedico esta entrada.
Tío, a tu salud y como día especial te tomaré en casa una jarrilla de vino. Ya sabes  que hoy encontralas en los bares de la villa es arto imposible.

.                                             Antonio y Patricio, preparando el palangre. 1931

En este día de San Roque, para toda la "Gente de Mar" que fueron de Portugalete.


Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales

miércoles, 13 de agosto de 2025

 

MIGUEL GUTIÉRREZ AGUADO “NAVARRILLO”

IM MEMORIAN 

PORTUGALETE 25-03-1941+ SANTURTZI 13-08-2025 



Hace días que escribí estas letras, la noche del lunes, el día que visité a mi hermano Miguelín recién ingresado en paliativos de San Juan de Dios de Santurtzi.

De vuelta a casa con la pena enmudecida, tenía entonces una necesidad inmediata de dejar plasmado los sentimientos recientes de la visita. Con plena entereza y conocimiento de su cercano destino, mi hermano Miguelín en pleno estado de lucidez me dio una clase magistral de cómo afrontar esos instantes en los que nos vemos abocados desde que nacemos. Consuelo de su entereza.

Fueron un par de horas de conversación en las que me demostró una sincera alegría por ver a la Familia junto a él, y la paz interna que sentía por ello. Y cuando mencionaba a la Familia, hacía hincapié en especial a la formada con Mari Carmen su mujer y la compañía de sus hermanos.



Suma de recuerdos y anécdotas familiares, cariño de hermanos, cariño que nace en la sangre, en el apellido que nos marca y nos obliga a estar unidos. Momentos en que éramos conscientes de que, aunque el tiempo no se puede detener, cabía el consuelo de echar la vista atrás y ser felices entre los recuerdos.

Se alegró enormemente cuando le mencioné que en su linaje el apellido Gutiérrez queda en las buenas manos de sus nietos Eneko y Erlantz, apellido que  de forma ininterrumpida lleva 9 generaciones en esta parte de las Encartaciones, en fin, dichos y anécdotas que nos hacen sonreír y ser felices.

Mi hermano Miguelín fue una persona con el pronto de “los Navarrillos”, como no, y a su vez luchadora, justa, respetuosa y respetable.  Lo que dice mucho de su persona, y de su ejemplo de vida.

Bueno tato, te quiero, te queremos, musu haundia eta agur bero bat.

Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales

 

 

viernes, 1 de agosto de 2025

 

VILLA PATATA



Uno de agosto, mes por antonomasia vacacional y del que conque rapidez hemos pasado de aquel slogan de Rosa Diez” veranea en Euskadi”, a este otro “si te quedas en Euskadi todo el verano, no tienes nada que contar”.

Por eso una alternativa a los altos costes y a la masificación en periodo estival vacacional puede perfectamente ser a lo que han recurrido durante varios días los navarrillos y patateros de Gasteiz. Días para recordar aquellos tiempos pretéritos, donde con poco hacíamos un mucho.

Para ello es imprescindible disponer de un terreno propio, o prestado por una amistad, donde poder plantar una tienda de campaña siendo  su cavidad no mayor a la de cuatro personas, o sea lo que sería en exclusividad para los de casa.  Para su puesta apunto es necesario poner en conocimiento esta actividad y hacer caso a las recomendaciones del vecindario. Imprescindible que la estancia sea con contrato unifamiliar y negociada día a día, a ser posible durante las cenas.

En el caso que nos ocupa, el lugar elegido está lo suficientemente alejado de la capital para no ser invadido por ruidos y visitas inesperadas.  El terruco dispone de piscina, bañera, wáter químico, agua caliente por el sol y fría en su medio ambiente. Productos hortícolas de primera mano, campo para correr y montes alrededor para recorrer. Naturaleza en estado puro en un resort de semilujo. 



Se dispone de todas las herramientas necesarias para que tengas los brazos y la mente ocupados. El huerto es el mejor yoga y gimnasio, mente y cuerpo. La comida cocinada a gas o leña. Los asados solo con leña. Sin televisión, también se puede prescindir de internet, y los más jóvenes tienen bastantes ocurrencias y juegos entre manos que no da tiempo al aburrimiento.

Un lujo, barato y sin estrés. A veces la felicidad está en la puerta de casa, y no hay que pagar con tarjeta para saberla disfrutar.

Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales

 

domingo, 27 de julio de 2025

 

SAN AURELIO Y NO TIENE ABUELA



Conocía que mi nombre tiene la particularidad de tener incluidas las cinco vocales, (como murciélago, abuelito, y a partir de aquí os dejo que el resto lo encontréis vosotros), pero desconocía que se me podía felicitar por mi santo en el mismo mes dos veces, como coincide  este año en dos domingos diferentes, el pasado día 20 de julio y hoy domingo 27.

Mi amigo Ángel Incertis ya me felicito el anterior día 20, pero por desconocimiento del resto de amigos, conocidos y demás familia ese día pasó por alto, así que os dejo la nueva oportunidad en este día, y si las felicitaciones santorales vienen acompañadas de intenciones de compartir gustosas viandas, la mesa y el mantel a mi disposición, el vino también. Ángel, contigo a mi cuenta, allá donde estoy nunca te olvidas de nosotros.

Y aunque no tengo abuela si preciso añadir que santo, santo, no es que sea, pero si me tengo por buena persona.



20 de julio- San Aurelio de Cartago Nació el 352 en Cartago, capital primada de una África que en aquella época contaba con más de 500 obispos, cifra que habla de la fe de aquellos territorios.

Compartió estudios en Cartago con el mismo San Agustín (2 años más pequeño, y en aquel momento bastante perdido en sus elucubraciones), manteniendo ambos en adelante una extensa amistad y relación epistolar. Poco después de marchar Agustín a Roma, fue ordenado Aurelio diácono en Cartago.

 Fue elegido obispo de Cartago el 392, y a lo largo de su ministerio convocó más de 30 sínodos provinciales, dirigidos sobre todo hacia la disciplina que debía seguir (y no olvidar) la jerarquía eclesiástica.

27 de julio- San Aurelio de Córdoba (del latín aurelius, dorado, valioso como el oro) (Córdoba, 825-ibídem, 27 de julio de 852) fue un cristiano, martirizado durante el califato de Abderramán II y canonizado por la Iglesia Católica, junto con su esposa santa Catalina, siendo considerados dos de los 48 Mártires de Córdoba. Su día en el santoral es el 27 de julio.

 Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales

domingo, 16 de marzo de 2025


MERCADO DE ABASTOS DE PORTUGALETE


La Vida Pasa, mientras el tiempo languidece entre los muros de la plaza del mercado de Portugalete.

El edificio actual de la plaza de mercado proyectado por el arquitecto Santos Zunzunegui, sustituyó al que realizó en primer lugar el arquitecto municipal Emiliano Pagazaurtundua en el año 1914,  y de cuyos recuerdos anteriores a su última actividad comercial solo nos queda “La Selecta”.

A consecuencia de los bombardeos que sufrió Portugalete por parte de los aliados franquistas en el año 1937, la plaza de mercado de Portugalete, como tantos otros edificios, sufrió grandes desperfectos, lo que obligó a que fuera completamente derribado y alzado en un  proyecto dirigido por el arquitecto Santos Zunzunegui en el año 1938  y cuyas obras de edificación fueron llevadas a cabo por el contratista Víctor Aroma Ercilla, celebrándose su inauguración  el 1 de febrero del año 1940.

Santos Zunzunegui además  de ser un afamado arquitecto, con numerosos proyectos llevados a cabo en Sestao, Portugalete y Bilbao, fue alcalde de la Villa durante los años 1916 y 1917, concejal en la Comisión de Fomento  durante los años 1918 y 1919, y  de nuevo alcalde de la Villa  desde el 15 octubre del año 1923, hasta el 9 de marzo del año 1926, fecha que presenta su renuncia por incompatibilidad con el cargo de Diputado Provincial de Bizkaia.

A partir de la década de los 60 hasta  el año 1990, el Mercado es el centro comercial de referencia, siendo a partir de esta fecha, cuando comienza su paulatino declive hasta el cierre de la persiana en junio del año 2010, debido sobre todo a la apertura de  nuevas superficies comerciales y cambio de hábitos de compra. De aquellos que quedaron de la última reforma de la plaza del año 1990,  mi hermana Araceli aguantó hasta el año 1998 con su adelantada jubilación a los 62 años de edad, después le seguirían Joserra Estancona, Begoña, Luis y el último y definitivo Txomin Hermosilla.

El edificio que yo conocí, tenía distribuida su venta en tres plantas, por las que han pasado tantas y tantas personas, siendo estas de las que tengo  recuerdos:

Planta baja para el pescado, con Josetxu, Txomin, Fidelina, Ana Mari, miembros de la familia” Los Pinches”, José Angel, Josefa, Trini etc.



Planta central para huevos, frutas y verduras; el matrimonio Antolín y Jacinta y su hija Blanqui, mis hermanas Araceli, Blaqui y Nieves, Lola, Casado, Ana Mari con sus lechugas, Carmen, José el Riojano, Aurora, Teresa "la portuguesa", las hermanas Arana, Avelina "la huevera" y un largo etc.


 En la planta superior la carnicería, charcutería, panaderías, y varios con; Adora, Eduardo Estancona padre e hijos Edu y Joserra, José Andrés Burgos, Dioni, Enriquetilla, José Ramón Madariaga y Pedrito, Paco Burgos, la charcutería de Mari Feli, Martín, la panadería de Lola Cembrana, y una larga lista de personas que trabajaron en la Plaza de la que destaco a Ángel Corta, trabajador del ayuntamiento cuyo labor consistía en tener limpia y ordenada la plaza. Misión que la cumplía con creces y otros cuyos nombres no localizo en el rincón del olvido,a los cuales que les pido mis disculpas.

Araceli Gutiérrez " Navarrilla"
a
                                                                  Txomin Hermosilla

Después estaba “el mercado de las aldeanas” los martes, jueves y sábados, hacían de este lugar el idóneo para visitar y comprar. Recuerdo con mucho cariño a Rosario vendiendo sus conejos y gallinas, a Norberto con su venta de huevos y  flores, a las aldeanas que desde de Urdúliz, Berango, Sopelana, en muchas ocasiones acompañadas de burros para transportar “la Vendeja”, aldeanas que vendían verdura y fruta de sus huertas y plantas para plantar. Alguna después de 40 años todavía se la puede ver algún sábado, otras como Begoña, Eva, Mari Carmen, hace tiempo que se jubilaron.

Ellas, las aldeanas pasaban de las Arenas a Portugalete a vender sus productos, otras personas, sobre todo mujeres, lo hacían diariamente al contrario, iban a servir o a trabajar a las Arenas, eran nuestras recadistas o nuestras dignas “chachas”. Mi hermana Nieves con 14 años en la farmacia Viuda de Molina y mi hermana Carmen con 13 años en la pescadería de Luis y Lola, también ejercieron como recadistas en aquella margen de la Ría. Con este trajín de personas, pasando por el mercado de la plaza, el que más o el que menos alguna compra realizaba en el tránsito.

Y en este singular edificio trascurrió parte de mi Vida, y principalmente la de mis hermanas, Blanqui, Araceli y Nieves, ellas, junto a la de tantas otras personas de los que guardo un grato recuerdo. En especial, porque con ellos en la actualidad sigo manteniendo un contacto personal; Txomin Hermosilla y los hermanos Eduardo y Txerra Estancona, a los que agradezco que me hayan despertado los recuerdos de la plaza.

El comienzo de que nuestra familia tuviera presencia en el mercado de Abastos de Portugalete, fue que mi hermana Blanqui, en el año 1964, con 13 años de edad entró a trabajar como recadista en el puesto de frutas que en aquel entonces dirigía la señora Tomasa, dos años después, en el año 1966, ante el cese del negocio por enfermedad de Tomasa, este puesto de frutas lo toman ella y nuestra hermana  mayor Araceli.




Transcurrieron dos años más hasta que Blanqui, encontró otro trabajo como dependienta de aceite, primero en Bilbao y después en el mercado de abastos de Santurtzi, eran los tiempos que Solís, ministro de Franco, se enriquecía vendiendo aceite de su cooperativa.

Araceli mientras pudo, mantuvo la frutería con la ayuda principalmente de nuestra  hermana Nieves, y la de otros hermanos, como es mi caso que estuve años acudiendo los sábados, en las vacaciones, más algunos otros días de mercado. Trabajando siempre con la máxima enseñada por nuestra ama Vicenta, “que para hacer un parroquiano, se necesita un año, para que se vaya un instante”. Seriedad en el Trabajo, Respeto y Educación eran sinónimos para que esta forma de actividad laboral tuviera continuidad.

Y de esta manera, debido a las nuevas formas del mercado comercial, mi hermana Araceli, después de 32 años de actividad, y ya van veinte y seis años de ello, cesó de un trabajo del que  al día de hoy nunca la he escuchado una queja.

Aurelio Gutiérrez Martín de Vidales